El Burro Inteligente.
Dobby era un burrito divertido. Tenía una cabeza grande con un cuerpo pequeño. Vivía en un pequeño pueblo con su madre y sus hermanos y hermanas. A Dobby le gustaba aprender y leer, pero a veces encontraba la escuela un poco difícil. Los otros animales solían molestarlo y decir cosas malas, como que era tonto, perezoso y feo. Pensaban que nunca podría lograr nada en su vida.
Dobby se sentía muy triste, pero no perdía la esperanza. Quería demostrar que era inteligente y trabajador. Todos los días estudiaba sus libros y hacía sus tareas. Escuchaba atentamente a sus maestros y hacía muchas preguntas. Dobby soñaba con ser maestro él mismo y ayudar a otros burros.
Un día, Dobby tuvo una oportunidad muy especial. Hubo un concurso para todas las escuelas de los alrededores. Los mejores alumnos de cada escuela podían participar en un juego en el que les hacían preguntas sobre todas las cosas que habían aprendido. El ganador ganaría algo muy bonito para seguir estudiando.
A Dobby le encantaría participar, pero el director no estaba convencido de inmediato. Pensaba que Dobby no sería tan bueno como los otros animales. Pensaba en otros animales, como un zorro inteligente, un sabio búho o un conejo rápido. Pero Dobby le suplicó que le diera una oportunidad. Le dijo que había trabajado muy duro y que sabía todo lo que estaba en los libros.
Al final, el director estuvo de acuerdo, pero advirtió a Dobby que no se sintiera triste si no ganaba. Dobby le agradeció y prometió hacer lo mejor que pudiera. Fue a casa y estudió aún más duro. Practicó todo lo que había aprendido e incluso hizo ejercicios con su madre.
Llegó el día del concurso. Dobby fue a la gran sala donde sería el juego. Allí vio a los otros jugadores. Todos eran más grandes, más rápidos y más fuertes que él. Lo miraban un poco mal y se burlaban de él. Decían que de todas formas no tenía oportunidad y que sería mejor que se rindiera.
Dobby se sentía un poco nervioso, pero no se dejaba intimidar. Se sentó en su lugar y esperó las preguntas. El juego comenzó. Las preguntas eran sobre cosas como por qué el cielo es azul, cuántas patas tiene una araña, qué animal hiberna en invierno, y muchas más. ¡Dobby sabía todas las respuestas! Presionó rápidamente el botón y dio la respuesta correcta. Era más rápido y más listo que los otros animales. Obtuvo la mayoría de los puntos y ¡ganó el juego!
Todos en la sala estaban asombrados. Nadie había pensado que un burro ganaría. Dobby estaba extremadamente feliz. ¡Había hecho realidad su sueño! Obtuvo algo muy bonito para seguir estudiando. Estudió duro y se convirtió en un gran maestro. Enseñó a otros burros e los inspiró a aprender y crecer. Dobby fue respetado y amado por todos. Era inteligente, trabajador y hermoso. Era Dobby, el burro que se convirtió en maestro.